Nuestro compromiso con la sociedad y las autoridades

Exhorto ante todo,
a que se hagan
rogativas, oraciones, peticiones
y acciones de gracias
por todos los hombres,
por los reyes y por todos los que tienen autoridad,
para que vivamos quieta y reposadamente
en toda piedad y honestidad.

Esto es bueno y agradable
delante de Dios, nuestro Salvador,
el cual quiere que todos los hombres sean salvos
y vengan al conocimiento de la verdad,
pues hay un solo Dios,
y un solo mediador entre Dios y los hombres:
Jesucristo hombre,
el cual se dio a sí mismo en rescate por todos,
de lo cual se dio testimonio a su debido tiempo.
(I carta a Timoteo 2. 1-6)