FELIZ EL PUEBLO CUYO DIOS ES EL SEÑOR SALMO 33


Aclamen al Señor, hombres buenos;
    en labios de los buenos, la alabanza es hermosa.
(...)
 La palabra del Señor es verdadera;
sus obras demuestran su fidelidad.
 El Señor ama lo justo y lo recto;
¡su amor llena toda la tierra!
 (...)
 Honren al Señor todos en la tierra;
    ¡hónrenlo todos los habitantes del mundo!
 (...)
 El Señor hace fracasar por completo
    los proyectos de los pueblos que en Él no creen,
 pero los proyectos del Señor permanecen firmes para siempre.

 Feliz el pueblo cuyo Dios es el Señor,
    el pueblo que ha escogido como suyo.
 El Señor mira desde el cielo y ve a todos los hombres;
 desde el lugar donde vive
observa a los que habitan la tierra;
 Él es quien formó sus corazones
y quien vigila todo lo que hacen.

 Ningún rey se salva por su gran ejército,
    ni se salvan los valientes por su mucha fuerza;
(...)
 Nosotros confiamos en el Señor;
¡él nos ayuda y nos protege!
 Nuestro corazón se alegra en el Señor;
    confiamos plenamente en su santo nombre.
 ¡Que tu amor, Señor, nos acompañe,
tal como esperamos de ti!